Tercer día de Quinario

La reflexión de este tercer día de Quinario ha girado en torno a nuestros mayores. Así, nuestro Director Espiritual, D. Gabriel Sánchez, nos ha recordado que la palabra presbítero procede del griego y significa "el más anciano", ya que la Iglesia primitiva escogía a los mayores en el conocimiento de la fe.

Ha resaltado la importancia de los mayores en otras culturas, como las de África ("cuando se entierra a un anciano se entierra una biblioteca"). [...] Si solo valoramos aquello que produce es como si no viviésemos. Los ancianos "han leído en el libro de la vida" (Descartes). Como indica el Libro de la Sabiduría, hay que respetar a los ancianos, aunque chocheen, y tenerles el máximo respeto.

Dirigiéndose a los mayores presentes en la Eucaristía les indicó que deberían saber que vuestra lucha es para que tengan un futuro mejor quienes vienen detrás para mayor gloria de Dios. [...] Cada edad tiene su ilusión y cada día tiene su afán.

En la senectud se tiene la certeza de que "la historia es la maestra de la vida" (Cicerón). Siempre se tiene algo que decir o que enseñar. [...] El anciano Simeón -citado en el Evangelio de san Lucas- esperaba al Señor, cumpliéndose así lo mejor de su vida. [...] Debemos valorar a los mayores pues en ellos vemos a Jesús que ha pasado por sus vidas. [...] Las personas mayores han de disfrutar también de la vida, de cada mañana, y dar gracias a Dios por ello.