In memoriam

Nuestro querido hermano Salvador Isern nos ha remitido una nota biográfica sobre su hermano Luis María (q. e. p. d.) que reproducimos a continuación:

LUIS MARÍA IGNACIO ISERN ANGLADA

El sábado día 28 de febrero a la edad de 58 años, hizo su último viaje a la eternidad, donde nos espera.
Había nacido en Guadalcanal de la Sierra (Sevilla) el 24 de febrero de 1951 y bautizado en la iglesia parroquia de Nª Sª de la Asunción.
Cursó sus primeros estudios en el Colegio de las Hermanas de la Doctrina Cristiana.
Era el menor de nueve hermanos, cuatro de ellos también nacidos en Guadalcanal.
De su infancia le gustaba hablar de sus amigos, la feria y sobre todo de la Semana Santa, en la que se vestía de nazareno. Volvió en varias ocasiones, la última el pasado año con su mujer, hijos y sobrinos que se vistieron de nazarenos.
En el año 1958 la familia Isern-Anglada se trasladó a Parets del Valles (BCN).
Estudió el bachillerato en el colegio de los jesuitas de Barcelona.
Se licenció en Farmacia y Óptica por la Universidad de Barcelona.
En la actualidad ejercía ambas profesiones en la localidad de Parets del Vallés (BCN).
Casado con Lourdes Castro Filvá, tuvieron tres hijos Lourdes, Lluís y Marina.
Era persona inquieta, con ilusiones, había viajado por los seis continentes siempre en compañía de su mujer, practicaba el golf y era un buen grumete.
Fue un militante activo (boyscout) y formó parte de varias asociaciones profesionales y civiles.
En el pasado mes de noviembre viajó con su mujer a Tierra Santa, donde fue muy feliz y recordó la Semana Santa de su Guadalcanal natal.
Llevó la enfermedad con mucha entereza y resignación, sabía lo que tenía y también su final, pero no perdió nunca la fe ni la esperanza.
El sacerdote que le asistió y dio la extremaunción hizo de él una semblanza de buen cristiano como lo recibió y como le despidió.
Todos los hermanos tuvimos la gran dicha de compartir el día de su 58 cumpleaños, y disfrutar de sus últimos momentos.
La fe que compartimos, que nos dieron nuestros padres, nos da la esperanza de que pronto nos volveremos a reunir para toda la eternidad.

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En la foto inferior, paso de la Cofradía por su casa natal (calle Juan Carlos I, 8) en 1951.