El pasado domingo, tras el desmontaje y traslado a su lugar de origen de la plataforma metálica que sirvió para dar forma al altar de nuestro Quinario, procedimos a mudar el paso de palio desde la nave en la que se encuentra durante todo el año hasta la iglesia parroquial. La nueva peana que estrenará el Sábado Santo (D. m.) el paso de la Santísima Virgen de los Dolores obligaba a montar el palio completo para cerciorarnos de las medidas a partir de ahora. Así, se colocaron la peana, los doce varales, el palio -cuyo techo estrena estructura y tapizado, con la Inmaculada vuelta a bordar por nuestro hermano y vestidor de la Santísima Virgen, D. Miguel Ángel León-, la imagen de nuestra Titular -con la corona de salida- y el pollero sobre el que descansa el manto..
Efectuados los ajustes oportunos y a la espera de los últimos retoques previos al montaje para la Semana Santa, se volvió a desmontar todo y se trasladó el paso a una nave más cercana al templo a la espera del próximo ensayo de los hermanos costaleros. Desde este punto de encuentro aprovechamos la ocasión para dar nuestras más sinceras gracias a todos los hermanos y hermanas que nos han echado una mano en estos días anteriores y posteriores al Quinario y a la Función Principal de Instituto.
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En la fotografía, una imagen de archivo del paso de palio tras su entrada en la iglesia concluida la Estación de Penitencia de 2007.
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