Hace unos días la familia de acogida de Pavel -Joaquín, Mari Luz, Alberto y Alejandro- recibían una carta y una tarjeta de felicitación remitida por los padres de este pequeño bielorruso que -junto con Sasha y Karolina- nos visita cada verano para su saneamiento.
En ella, sus padres agradecían la atención prestada a la familia y los regalos que reciben en Belarús procedentes de la familia Barradas-Ruiz. Contaban que este pasado invierno había sido más crudo que de costumbre por aquellas latitudes. Felicitaban a Alejandro por su cumpleaños y le deseaban éxito en toda su carrera de estudiante, salud, suerte y que todos sus deseos se cumplan. Finalmente nos comunicaban que ya habían realizado todas las gestiones previas a la estancia de Pavel en el seno de nuestra Hermandad. No olvidaban tampoco a los abuelos de acogida: Joaquín, Pepe, Ana y Paca.
Os muestro tanto la tarjeta de felicitación como una de las páginas de la carta, escrita en ruso. Dentro del sobre se adjuntaba la correspondiente traducción; de lo contrario, obviamente, habría sido imposible entenderla.
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